Las Escrituras revelan que Dios desea que prosperemos y tengamos salud, así como nuestra alma prospera. En Deuteronomio 8:18, él declara: “Y te acordarás de Jehová tu Dios, porque es él quien te da poder para hacer las riquezas, para que pueda establecer su pacto que juró a tus padres, como lo es hoy”. Salmos 1:3 declara: el hombre que se deleita en el Señor y medita en Su palabra día y noche prosperará en todo lo que haga. La clave aquí es la aplicación consistente de la palabra y los principios de Dios en la vida de uno. Hay una gracia para prosperar en tu vida si eliges recibirlo y caminar en él. La analogía de un árbol plantado por los ríos de agua da la imagen de uno que permanece cerca de Dios y Su palabra. Debido a esta práctica, siempre tendrás toda la sabiduría, provisión, fuerza. y la salud que necesitas para lograr todo lo que Él te llama a hacer. Si aún no lo has hecho, comienza ahora a plantarte junto a los ríos de la palabra y la sabiduría de Dios.
Salmos 1:3 “Será como el árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no se marchitará; y todo lo que él haga prosperará”.
¿A quién debemos escuchar? Esto es importante porque solo podemos responder a nuestro futuro y a nuestros desafíos con el conocimiento que poseemos actualmente. Si no tenemos la información correcta, puede ser desastroso para nosotros. El otro día, las noticias informaron que un oficial de policía entró a su casa y encontró a alguien en su departamento. Ella disparó y mató al presunto “intruso”. Sin embargo, resultó que ella había entrado en el departamento de su vecino y había matado a un hombre inocente. La información y el entendimiento incorrecto puede destruir a usted y a otros. Por lo tanto, debemos asegurarnos absolutamente de: (1) leer la Palabra y buscar la sabiduría de Dios, (2) nuestra información es correcta y (3) rodearnos de las personas adecuadas para obtener buenos consejos, sabiduría e información. Eclesiastés 7: 5 (GW) dice: “Es mejor escuchar a las personas sabias que te reprenden que a los tontos que cantan tus alabanzas”. La versión amplificada de Eclesiastés 7: 5 lo dice de esta manera: “Es mejor escuchar la reprensión del sabio y buscar la sabiduría que escuchar la canción de los necios y perseguir la estupidez”. Todos estamos conectados con muchas personas, ya sea en el trabajo, en nuestra comunidad, familia e incluso en la iglesia. Esto significa que siempre escuchamos muchos consejos o información. El desafío es filtrar toda la información tonta e incorrecta, y aceptar solo la sabiduría y la comprensión que nos ayudarán a tomar las decisiones correctas y vivir una vida justa. No sigas a las multitudes. Busque personas sabias y reciba sus consejos y correcciones. ¡Será vida y salud para usted, y podrá seguir los caminos que agradarán a Dios y beneficiarán a su familia!