Las promesas de Dios caminan de la mano con la guerra.
El adereza mesa delante de nosotros en presencia de nuestros angustiadores.
Los gigantes habitan en la tierra prometida y necesitan ser desalojados.
Estas son verdades poderosas. Recuerda que estás en una batalla, pero recuerda siempre que ¡El Señor Jesús ya derrotó a nuestro enemigo! ¡Camina en la victoria que Él ya ganó para nosotros!
Juan 16:33 “Estas cosas que te he dicho, para que tengas paz en mí. En el mundo tendrás tribulación; pero confía, he vencido al mundo”