Yo amo a los pozos que veo cuando voy al campo. Pozos dan vida porque la comunidad puede venir y sacar agua limpia en cualquier momento que la necesiten. Un pozo está conectado a una enorme corriente subterránea de agua limpia y pura que puede proporcionar esta preciosa sustancia a una comunidad en los años venideros. Proverbios 10:11 dice: “La boca de un hombre justo es un pozo de vida”. Esto es muy importante de entender porque hablamos desde la abundancia de nuestros corazones. Podemos dar sabiduría, amor, inspiración y verdad que dan vida, o dependiendo de la corriente a la que estemos conectados, podemos darle libertad al odio, temor, duda, confusión, engaño, entre otras cosas. La lengua puede contaminar todo el cuerpo. La lengua puede bendecir o maldecir. El poder de la vida y la muerte está en el poder de la lengua (Santiago 3, Proverbios 18:21). El apóstol Santiago nos recordó que debemos tener mucho cuidado con la forma en que usamos nuestras bocas. Nuestra comunicación es parte de la forma en que el Espíritu Santo ministra a través de nosotros. ¡Incluso el Evangelio de Jesucristo no puede ser conocido a menos que usemos nuestras bocas! Entonces, el Apóstol nos recuerda esta poderosa verdad: Santiago 3:10-12 dice: “De una misma boca salen bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. ¿Puede acaso brotar de una misma fuente agua dulce y agua salada? Hermanos míos, ¿acaso puede dar aceitunas una higuera o higos una vid? Pues tampoco una fuente de agua salada puede dar agua dulce.” ¿Qué beneficio sacan la gente de tu pozo?
“El llanto puede durar una noche, pero la alegría viene por la mañana”
Todos experimentamos ataques del enemigo. Esto es parte de la experiencia cristiana. El Señor Jesús dijo una vez: “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis tribulación; mas tened ánimo, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33). Lo bueno es que las Escrituras revelan que estos tiempos de persecución, tribulación y pruebas son solo por una temporada. El Salmo 30: 5 dice: “El llanto puede durar una noche, pero la alegría viene por la mañana”. Las estaciones de prueba tienen fecha de vencimiento. Cuando Satanás probó a Jesús, lo dejó después de haberlo probado: Lucas 4: 12-13 “Y respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios. Y cuando el diablo hubo terminado toda la tentación, se apartó de él por una temporada “. Entonces, si estás en medio de una prueba o en el desierto, recuerda hoy que no es permanente. Recuerda que Él nos dijo que tuviéramos buen ánimo porque ya venció al mundo, y ahora tenemos el espíritu del vencedor dentro de nosotros. ¡Con Su ayuda, saldrás victorioso al otro lado y con un gran testimonio!