¡La humildad es la puerta a las bendiciones de Dios!

En el mundo de hoy, muchos adquieren riquezas tomando ventaja de otros. A muchas empresas y empresarios no les importa cómo su proceso de ganar dinero afecta a otras personas, siempre y cuando estén obteniendo ganancias. Cuando nos esforzamos por ganar dinero sin importar lo que les pase a los demás, o cuando usamos medios ilegales para ganar dinero, invariablemente traerá consigo estrés, preocupaciones, temor y retribución. De vez en cuando, vemos personas famosas arrestadas porque usaron medios ilegales para crear riquezas. Otra cosa que escuchamos es que algunos sufrieron trastornos mentales o emocionales porque no pudieron soportar la presión y el estrés continuo  de mantener las riquezas que ganaron ilegalmente. Sin embargo, cuando Dios nos proporciona una provisión abundante, también nos da el privilegio de poder disfrutarla sin estrés y preocupación. Podemos dormir tranquilos y con confianza porque vivimos nuestras vidas con integridad piadosa. ¡Él le da a su amado sueño apacible (Salmos 127: 2)! Junto con los abundantes recursos con el cual nos bendice, también nos da honor y vida. Esto mi amigo, es la recompensa de la humildad!

Proverbios 22: 4 “La recompensa de la humildad [es decir, tener una visión realista de su importancia] y el temor [reverente] del Señor es la riqueza, el honor y la vida”

Ten cuidado en lo que te estás enfocando!

Todos nos enfocamos en algo. Aquello en lo que te concentras, crece y aumenta, y lo que ignoras, pierde poder e influencia en tu vida. El enfoque proviene de la palabra griega “Aphorao”, que significa: “concentrar tu mirada en algo”. La palabra “enfocarse” en inglés significa: atención dirigida a un punto de concentración; un estado o condición que permite una clara percepción o comprensión. Jesús enfocó sus acciones y energías en su misión. Pablo enfocó sus esfuerzos para avanzar hacia la marca del gran llamado de Dios en su vida. Uno de los objetivos principales del enemigo es alejarnos de nuestro enfoque, porque cuando una persona no está enfocada, hace mal uso o abuso de sus recursos, tiempo y energías, y por lo tanto, no producen nada de valor. Desaprovechan su potencial. El enfoque es su amigo. El enfoque lo mantendrá en el camino correcto. Le recordará dónde invertir y gastar su energía limitada. El enfoque activa la parte creativa de su cerebro que le permitirá comenzar a ver las cosas que necesita hacer o adquirir. Por eso, hoy te pregunto en qué te estás enfocando?

1 Juan 2:4 “Quienquiera que diga: “Lo conozco”, pero no cumple habitualmente [se enfoca en Sus preceptos y obedece] Sus mandamientos (enseñanzas), es un mentiroso, y la verdad [de la palabra divina] no está en él”