Uno de los grandes privilegios que tenemos es ser las manos de Dios en este mundo. En otras palabras, podemos expresar su amor a este mundo por nuestras acciones de amor y gracia. Una de las formas en que podemos hacer esto es ser amables y dadivosos con aquellos que sufren carencias. Cuando le ayudamos en medio de sus dificultades y retos, esto bendice el corazón de Dios, y Él nos recompensa.. Proverbios 19:17 (ISV) dice: “Quien sea amable con los pobres está prestando al Señor: el beneficio de su ofrenda le será devuelto en abundancia”.¡Observa que dice que la ofrenda para los pobres volverá a nosotros en abundancia! Nunca podemos superar a Dios. el es MUY generoso, y cuando ve que lo estamos representando con amor y ternura, continuará dándonos recursos con abundante provisión para que podamos seguir siendo generosos con los demás.
2 Corintios 9:8-11 “Y Dios te proporcionará generosamente todo lo que necesites. Entonces siempre tendrás todo lo que necesitas para compartir con los demás. Sí, te enriquecerás en todos los sentidos para que puedas siempre ser generoso “
