En este nuevo año, necesitamos captar una poderosa revelación que Dios nos ama y tiene cuidado por nosotros. Nuestro instinto y reacción carnal es cuestionar si Dios está con nosotros o no cada vez que pasamos por dificultades o crisis. Hoy, decídase a declarar 1 Pedro 5: 7 cada día: “Echad toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.”. El tiene cuidado de nosotros. Esta es su palabra. Esta es su promesa. Someta todos tus pensamientos y emociones contrarios a la voluntad, amor y cuidado de Dios. Cuando tengas la tentación de cuestionar su amor y cuidado, toma ese pensamiento de inmediato y rechazalo y quítalo de tu mente. Además, haga una lista de tus preocupaciones actuales y luego echalas sobre el Señor. Deja que Él se ocupe de ti y, a su vez, te dará su paz. ¡Él es el Dios de paz y amor, por lo qual debemos caminar en paz y amor todos los días! ¡Es hora de pasar de confiar en nuestras emociones a confiar en la palabra de Dios! ¡Nuestras emociones son inconstantes, pero la palabra de Dios es fiel y verdadera!
Las navidades no son meramente una fiesta!
¡El verdadero mensaje de Navidad es el Evangelio, que es buenas noticias! Parte de esa buena noticia se encuentra en 2 Pedro 1: 3, que dice: “como Su poder divino nos ha dado todas las cosas que pertenecen a la vida y la santidad, a través del conocimiento de Aquel que nos llamó por gloria y virtud”. No solo somos salvos por su bondad, en Cristo, Él nos da todas las cosas que pertenecen a la vida y la santidad. Esto significa que nuestra eternidad está segura en Cristo, pero Él también provee por nuestras necesidades diarias. Él satisface todas nuestras necesidades de acuerdo con sus riquezas en gloria. La Navidad para nosotros no es solo un día; Es una revelación poderosa de cuánto Dios nos ama. Deje que el resto de este tiempo navideño sea de gratitud por lo que Dios ya ha hecho por nosotros.