Durante esta temporada navideña, muchos compartirán regalos unos con otros, sin embargo, muchos seguirán abrigando mala voluntad el uno con el otro. Se ocuparán de su “responsabilidad” de presentar un regalo, pero sus corazones aún estarán llenos de falta de perdón y de ofensa. El Señor Jesús enseñó que primero debemos asegurar la paz y el perdón antes de presentar nuestro regalo. Estas próximas semanas son un buen momento para considerar nuestros corazones para ver si hay alguna falta de perdón en nuestros corazones. Asegurémonos de tratar con cualquiera de estos problemas profundos antes de presentar nuestros regalos. Dios estará complacido cuando nos ocupemos de este negocio “más importante”.
Mateo 5:23 – 24 (NTV) “Por lo tanto, si presentas una ofrenda en el altar del templo y de pronto recuerdas que alguien tiene algo contra ti, 24 deja la ofrenda allí en el altar. Anda y reconcíliate con esa persona. Luego ven y presenta tu ofrenda a Dios.”
El apóstol Pablo nos instruyó en el Libro de Colosenses, capítulo 3, que nos pongamos el “amor”. Interesante manera de ponerlo. Realmente podemos “vestirnos” con amor. Es casi como ponerse una camisa. Sabemos cómo queremos vestirnos en cualquier día u ocasión. También podemos decidir vestirnos con amor. Es una decisión, no solo una emoción. El Señor mostro amor cuando colgó en la cruz para nosotros. Ahora nos instruye a que nos pongamos misericordias, bondad, humildad, mansedumbre, paciencia y amor. Esto es algo que hacemos. Él nos mostró cómo. Ahora es nuestro turno. El mundo se “viste” de odio, racismo, malas actitudes, envidia, avaricia, favoritismo y cosas por el estilo. Lo que nos diferenciará en este día es como nos “vestimos”. Tengo una pregunta para ti, ¿qué llevas puesto hoy?
Colosenses 3: 14-15 Y sobre todo, revístanse de amor, que es el vínculo perfecto. 15 Que en el corazón de ustedes gobierne la paz de Cristo, a la cual fueron llamados en un solo cuerpo. Y sean agradecidos.