Te preocupas por mi?

Cuando el Señor Jesús voluntariamente fue a la cruz por toda la humanidad, estaba revelando el más alto nivel de amor y cuidado en toda la historia. Anteriormente había lavado todos los pies de los discípulos y luego les había enseñado a lavarse los pies unos a otros. Esta accion revelaba la importancia de servir y cuidar el uno al otro. 1 Corintios 12:25 dice: “que no debe haber division en el cuerpo, sino que los miembros deben tener el mismo cuidado mutuo”. A medida que recibamos una clara revelación del amor de Dios, no solo que Él nos ama, sino que también ama “a través de nosotros”. A medida que nos amamos, es como el Señor mismo ama a través de nosotros. Jesús dijo que si le diéramos incluso una taza de agua a uno de sus “pequeñitos”, seria como si se lo estuviéramos sirviendo a El. El mundo quiere saber qué podemos hacer por ellos. ¡Pero el llamado más alto es cómo se puede revelar el amor de Cristo a través de nuestras vidas y acciones cada dia!

Filipenses 2: 4 (ERV) “No te intereses solo en tu propia vida, sino preocúpate también por la vida de los demás”.

Es tiempo de brillar!

El Señor Jesús enseñó que somos la luz del mundo (Mateo 5:14). Sin embargo, Él nos recuerda en el versículo 16 que debemos dejar que nuestra luz brille ante los hombres. Entonces, este no es un proceso automático. De hecho, podemos ocultar nuestra luz, y eso desagrada a nuestro Señor. Cuando elegimos dejar que brille nuestra luz, la gente comenzará a ver “nuestra luz”. Es interesante notar que la luz que la gente realmente ve son nuestras buenas obras. Esto significa que nuestras buenas obras revelan algo precioso al mundo. La luz revela cosas que antes estaban ocultas a la vista. Entonces, nuestras buenas obras revelan la bondad y el amor de Dios a quienes nos rodean y que no lo habían visto antes. Esto hace que glorifiquen a nuestro Padre Celestial. Por lo tanto, es vital que determinemos dejar que brille nuestra luz en lugar de ocultarla. ¡Es tiempo de brillar!

Mateo 5:16 “Deja que tu luz brille ante los hombres, para que vean tus buenas obras y glorifiquen a tu Padre en el cielo”