Me he dado cuenta de que la mayoría de las personas se niegan a aceptar la responsabilidad de sus decisiones y acciones. No enfrentarán sus malos hábitos y problemas y, en cambio, pasarán la mayor parte de su vida buscando a quién podrían culpar por sus problemas. Debido a esto, experimentan ciclos repetidos de fracaso y frustración. El pastor Mike dijo esto: “Nunca corregirás lo que no estás dispuesto a enfrentar. Resiste la tentación de justificarte. La verdad es temporalmente dolorosa, pero es permanentemente liberadora. Cambia hoy. Comienza a avanzar hacia los sueños y metas de tu vida”. David entendió esto. Por eso le rogó a Dios que expusiera cualquier cosa malvada escondida en su corazón. En última instancia, es nuestra responsabilidad ser serios con nuestro futuro y dejar de tolerar los malos hábitos y tendencias que frustran nuestro futuro bendito. Selah!
Salmo 139: 23-24 “Señor, examina y reconoce mi corazón: pon a prueba cada uno de mis pensamientos. Así verás si voy por mal camino, y me guiarás por el camino eterno”
