Leí estos tres versículos y me dieron gran consuelo y alegría. Salmos 118: 5-7 (NTV) “En mi angustia oré al Señor, y el Señor me respondió y me liberó. El Señor está por mí, así que no tendré temor. ¿Qué pueden hacerme las personas simples? Sí, el Señor está por mí; él me ayudará. Miraré triunfante a los que me odian.” Al mirar a mi pasado y recordar los tiempos de angustia y dolor, mi punto de avance fue cuando fui ante el Señor y le presenté las cosas que me estaban causando angustia y dolor. En todos los casos, el Señor me ayudó a superar los problemas y, en su lugar, me dio Su paz, gozo y fortaleza. Hoy sé que Él está conmigo porque Su palabra lo promete. Él es fiel. Él es nuestro Padre Celestial. Él es nuestro héroe. Él es nuestro Salvador. Él nos ayuda a derrotar a todos nuestros enemigos. ¡Él nos hará triunfar sobre todos ellos! Si estás sufriendo dolor o angustia, clama hoy a Dios porque Él está a tu lado para ayudarte, fortalecerte, liberarte y permitirte mirar triunfante a quienes te odian.
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