David pasó por muchos días oscuros. Hubo momentos en que pensó que iba a morir. Fue durante esos tiempos oscuros que clamo al Señor, y el Señor lo libro de todos sus problemas.
Salmo 34:17 “El justo clama, y el Señor escucha, y los libra de todas sus angustias.”
David aprendió a no temer al mal cuando asomaba su fea cabeza, porque sabía que Dios estaba con él en las buenas y en las malas. Jesús nos prometió que siempre estaría con nosotros. Nunca permitas que el enemigo de tu alma te engañe haciéndote creer que Dios te ha abandonado. ¡Él nunca nos deja ni nos desampara, incluso cuando pasamos por el valle de sombra de muerte!
Salmos 23:4 “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno; porque Tu estas conmigo.”
Así que recuerda hoy que podemos caminar con confianza a través de esos momentos difíciles de la vida y llegar seguros al otro lado, porque Él está contigo y te librará de todos tus problemas.
Salmo 34:19 “Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas lo librará el Señor”