¡Es hora de orar e interceder por nuestro projimo!

Si hubo algún momento en que la oración y la intercesión fueron necesarias, es ahora. Nos demos cuenta o no, hemos entrado en una época de guerra y conflicto. Nuestros corazones colectivos se han visto impactados por las noticias de lo que está sucediendo en Israel y el Medio Oriente. Y con el increíble acceso que todos tenemos a las noticias mundiales y a las redes sociales, todos podemos ver en tiempo real lo que está sucediendo a nivel mundial. Salmo 122: 6 y 7 dice: “Pidamos por la paz de Jerusalén, y porque prosperen los que te aman. Que haya paz dentro de tus murallas, y se respire tranquilidad en tus palacios.” Este es un momento para orar por sabiduría para nuestros líderes, tanto a nivel nacional como internacional. Los problemas y cuestiones parecen insuperables. Pero en momentos como este, recuerdo cómo Dios le dio al rey Salomón sabiduría sobrenatural para lidiar con aparentes imposibilidades. Ahora oro por la sabiduría salomónica para nuestros líderes, para que haya un rápido final a esta horrible guerra y un alto el fuego duradero en beneficio de todas las víctimas inocentes que están sufriendo en Israel y Gaza. Dios ama al mundo y, como cristianos, estamos llamados a alcanzar al mundo con el Evangelio. La forma en que oremos e intercedamos en los próximos días puede reflejar el amor de Dios hacia quienes nos rodean. El odio no puede ni podrá sanarnos. Sólo el amor puede hacerlo, y por eso ahora Juan 3:16 se vuelve aún más relevante que nunca. Seamos un reflejo de ese amor y oremos por nuestros vecinos, tanto a nivel local e internacional. Y más que orar, amemos a nuestro prójimo, ¡tal como nos enseñó el Señor Jesús!