Esto te defendera fuertemente!

¿Has visto cómo las personas reciben una herencia y, en lugar de invertirla sabiamente, la desaprovechan? Este es el problema cuando se entrega la abundancia a aquellos que no tienen la sabiduría para administrarla adecuadamente. El rey Salomón dijo: “La sabiduría es buena con una herencia y es provechosa para los que ven el sol”. (Eclesiastés 7:11) Continúa diciendo que la sabiduría también es una defensa. Personalmente he visto a personas meterse en problemas varias veces debido a la falta de sabiduría. Hablaron o actuaron de maneras que solo atrajeron el peligro y la desgracia. Por el contrario, cuando una persona habla o actúa con sabiduría, produce vida, prosperidad, soluciones efectivas, paz y buena voluntad. El proverbista dijo: “La sabiduría es lo principal; por lo tanto, obtén sabiduría. Y en todo lo que recibas, obtén comprensión”. (Proverbios 4: 7) ¿Y dónde puedes comenzar el proceso de adquirir sabiduría? También respondió a esa pregunta: “El temor del Señor es el principio del conocimiento, pero los necios desprecian la sabiduría y la instrucción (Proverbios 1: 7). ¿Está usted persiguiendo cosas que realmente no importarán en los próximos años, o está persiguiendo a Dios y su sabiduría? Recuerda, aquellos que solo persiguen las cosas están persiguiendo sueños vacíos al final del día. ¡Persigue la sabiduría y todo lo bueno seguirá!

Eclesiastés 7: 11 y 12 “La sabiduría es buena con una herencia y es provechosa para quienes ven el sol. Porque la sabiduría es una defensa, como el dinero es una defensa, pero la excelencia del conocimiento es que la sabiduría da vida a quienes la tienen”.

De donde viene el poder?

La forma en que uno oye a la gente se jactan de sí misma es bastante sorprendente. Las escrituras nos recuerda que somos como frascos de arcilla frágiles. Somos como la hierba, que está aquí hoy, y mañana desvanece. Muchos se jactan de grandes cosas, y piensan que son mejores que otros, pero en realidad, somos simplemente seres humanos frágiles mal guiados. El Apóstol Pablo sabia de que aunque Dios lo usaba poderosamente, era Dios quien obró poderosamente a través de él. El poder vino de Dios, no de él. El orgullo es un pecado principal. El orgullo convirtió el arcángel lucifer al diablo. Si uno no es cuidadoso, el orgullo puede destruir el propósito y el destino. Nuestro gozo debe ser que “Cristo en nosotros” brille en todas nuestras acciones. Nuestro mayor deseo debe ser traerle gloria a Dios en todas nuestras acciones y no esforzarnos por construir monumentos para nosotros mismos. Al final de nuestras vidas, lo único que durará es lo que hicimos por Jesús. Todas las acciones orgullosas se lo llevara el viento. Ellos serán olvidados. Pero lo que hagamos por Dios perdurará por generaciones.

2 Corintios 4: 7 (NKJV) “Pero tenemos este tesoro en vasijas de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios y no de nosotros”.

2 Corintios 4: 7 (NTV) “Ahora tenemos esta luz brillando en nuestros corazones, pero nosotros mismos somos como vasijas de barro frágiles que contienen este gran tesoro. Esto deja claro que nuestro gran poder proviene de Dios, no de nosotros mismos”.