Aquí hay una poderosa revelación para Lunes: “No le des lugar al diablo”. Efesios 4:27. Tenemos autoridad en Cristo para resistir al enemigo. Sin embargo, él es un engañador, y calumnioso también. Este mismo verso en la versión TPT de la Biblia dice: “¡No le dé al acusador calumnioso, el diablo, la oportunidad de manipularte!” El enemigo, mediante el uso de acusaciones y el engaño, siempre intenta manipularte para que le brinde la oportunidad de llevarlo al pecado, ya sea para que guarde rencor, alimente la ira, albergue el resentimiento o cultive la amargura. Si él puede meterte en cualquiera de esos estados, puede manipularte y paralizar tu fe. Dios nos recuerda hoy que no debemos darle ningún lugar ni ninguna oportunidad en nuestras vidas. Vive una vida y actitud de amor y perdón, y si algo te enoja, no lo guardes. Resuelva sus problemas rápidamente y el no podrá manipularte ni controlarte. ¡Después de todo, mayor es el que está dentro de ti que el que está en el mundo! Lee este versículo una vez más en la versión Amplificada: “Y no le des al diablo la oportunidad [de llevarte al pecado guardando rencor, alimentando la ira, abrigando resentimiento o cultivando amargura].
Seria una oportunidad o una crisis?
Las oportunidades y las crisis a veces parecen muy similares. Cuando los doce espías regresaron para dar su informe a todos los israelitas, diez de ellos dijeron que simplemente no podían tomar la tierra porque gigantes estaban presentes. Dos de los espías dijeron que la tierra era preciosa y que estaban listos para tomar la tierra. Para los diez espías, se había convertido en una crisis. para Joshua y Caleb, fue una oportunidad divina. Proverbios 10: 5 dice: “Conoce la importancia de la temporada en la que estás y qué hijo sabio serás. ¡Pero qué desperdicio cuando un hijo incompetente duerme durante su día de oportunidades!” Una crisis o una oportunidad es un momento en que se debe tomar una decisión. Tiene que haber algún tipo de cambio o acción para poder resolver la crisis o aprovechar la oportunidad. Las crisis muchas veces surgen debido a malas decisiones o mala gestión pasada de nuestros recursos. Lo bueno es que las crisis pueden ser momentos para la corrección. Si prestamos atención al momento y corregimos los errores pasados, efectivamente podemos salir mejor por ello. Si aprovechamos la oportunidad en el momento oportuno, podemos beneficiar enormemente. Ya sea una crisis o una oportunidad, nuestras acciones determinarán si dejamos esa experiencia en victoria o derrota, con más o menos, con grandes recuerdos o arrepentimientos. Bueno, ¿es una crisis, o una oportunidad?