Rechaza este mal habito con todas tus fuerzas!

La procrastinación es es un retraso en la activación de los pasos que debe seguir para lograr algo. El diccionario Merriam Webster lo expresa de esta manera: Procrastinación: postergar intencionalmente y habitualmente; postergar intencionalmente el hacer algo que debe hacerse; Retrasar. Es poner la comodidad momentánea por encima de lo que realmente se necesita hacer, poniéndose así uno mismo en posición de disfrutar algo en el momento, pero pagando un precio amargo en el futuro cercano. Es negarse a hacer algo hoy que luego lamentará no haberlo hecho cuando era necesario. La procrastinación es una enfermedad autoimpuesta. Es un enemigo amargo, mortal. Es un ladrón sin compasión. Roba a jóvenes y viejos por igual. Toma y nunca da. Por lo tanto, determina hoy tratar a la procrastinación como uno de tus peores enemigos. Recházalo y pon por obra lo que Dios ha puesto en tus manos. Hay innumerables personas que estan esperando que actives los dones y la gracia que reside en ti.

Eclesiastés 5: 4 – “Cuando haces una promesa a Dios, no te demores en cumplirla, porque Dios no se complace en el tonto. Mantén todas las promesas que le hagas”