La distracción es el proceso de desviar la atención de otra persona. La distracción también puede traer confucion. Dios nos esta llamando a que rechacemos todo aquello que nos distraigan de nuestra fe. Jesús puso su atención en el premio y se negó a distraerse de su propósito. Su propósito le dio gozo porque sabía que Su sacrificio traería salvación y liberación al mundo, ¡y eso nos incluye a todos nosotros! Todo lo que hizo en la tierra estuvo dirigido a ese objetivo. Nunca permitió que nada ni nadie lo distrajera de Su propósito. ¡El apóstol Pablo también se negó a permitir que nada ni nadie lo disuadiera o lo distrajera del premio del supremo llamado de Dios en Jesucristo! Escribió en Filipenses 3:13-14: “Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús.”
!Hoy, decide que ya no permitirás que nada ni nadie te distraiga del alto llamado de Dios en tu vida!
Hebreos 12:2 (RVR1960) “Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de el sufrió la cruz, menospreciando el oprobio,y se sentó a la diestra del trono de Dios. [llevándolo a la madurez y la perfección]”
