Señor, concédenos la capacidad de prever y evitar el peligro!

Prever algo es ver o saber algo de antemano. Es anticipar efectivamente algo. Esto viene de la experiencia y el discernimiento. Cuando era niña, mi madre me dijo que no tocara la plancha caliente. Lo toqué. Ahora puedo prever que si toco una plancha caliente, me quemaré. Proverbios 27:12 dice: “Una persona prudente prevé el peligro y toma precauciones. El simplón sigue ciegamente y sufre las consecuencias”. Me preocupo mucho por las personas cuando toman decisiones apresuradas, especialmente cuando la decisión puede perjudicarles a ellos o a otros. Cuántas veces he escuchado a alguien que me dice: “Desearía no haber tomado esa decisión tan rápidamente”. Se prudente; tómese un tiempo para hacer una investigación antes de comprar algo. Investigue ese producto o servicio un poco más antes de comprarlo. Conosca alguien mejor antes de entrar en una relación. En el futuro, decida en no ser un simplón. En cambio sé prudente. ¡Tu futuro depende de ello!

Proverbios 27:12 “Una persona prudente prevé el peligro y toma precauciones. El simplón va ciego y sufre las consecuencias”

Es bueno depender en el Señor!

La confianza es una creencia poderosa. Cuando confiamos, actuamos con una dependencia positiva de aquellos en quienes confiamos. La confianza genera seguridad y confianza en las relaciones. La confianza nos hace sentir seguros con otros porque los percibimos como confiables. Podemos depender de una persona confiable. Este es uno de los factores más importantes en cualquier relación exitosa. Lamentaciones 3: 25,26 (NTV) dice: “El Señor es bueno con los que dependen de El, con los que lo buscan. Así que es bueno esperar tranquilamente la salvación del Señor”. El Salmo 5:11 dice: “Se alegrarán todos los que confían en ti; para siempre gritarán de júbilo, pues tú los proteges. Los que aman tu nombre se regocijarán en ti,”. La gente podría haberte fallado en el pasado, pero nunca permitas que eso se filtre en tu relación con Dios. Dios no es un hombre para que mienta. Si lo dijo, lo hará; Si lo habló, lo hará realidad. Deje que su confianza en el Señor sea su ancla y fortaleza en su vida. Incluso si la gente te falla, Dios está contigo. Él nunca te fallará. ¡Recuerde, el Señor es bueno con los que dependen de Él!