Quien aprovechara esta oportunidad?

¿Alguna vez has fallado en aprovechar una gran oportunidad? Más tarde, el arrepentimiento podría haberse establecido cuando te diste cuenta de lo que te perdiste. Efesios 5:16 (TPT) dice: “Aprovecha todos los días a medida que vive tu vida para sus propósitos”. Dondequiera que mires, puedes ver cómo las personas intentan aprovecharse de ti. Puedes verlo en comerciales donde las empresas intentan venderte algo sin cesar. Puede verlo en las llamadas automáticas diarias que promocionan todo tipo de productos o servicios. Incluso algunos de nuestra familia intentan aprovecharse de nosotros. 2 Corintios 2:11 confirma que Satanás también intenta aprovecharse de nosotros: “Para que Satanás no se aproveche de nosotros, porque no ignoramos sus dispositivos”. Es hora que te des cuenta de que Dios nos ha dado discernimiento y sabiduría para poder aprovechar cada día y maximizar los recursos y las relaciones con las que Él nos ha bendecido. Esto nos permitirá agradarle a Él, y también poder ser ministros eficaces donde Él nos ha sembrado. Determine hoy para no permitir que el enemigo se aproveche de usted. En su lugar, aprovecha cada oportunidad. El Espíritu Santo le mostrará cómo hacerlo mientras lo busca y le pide sabiduría diaria.

Efesios 5:16 (TPT) “Aproveche al máximo cada día que vive su vida para sus propósitos”.

“Voy a tener que limpiar tu boca con jabón!”

Nuestras palabras son más poderosas de lo que la mayoría de las personas se dan cuenta. Las palabras contienen imágenes, sentimientos, intenciones y la capacidad de afectar los puntos de vista y las emociones de otras personas. Las palabras pueden ayudar a comunicar nuestras necesidades y sentimientos. Las palabras pueden enmarcar nuestro futuro y nuestro destino. Las palabras también pueden dañar, herir y destruir. Mateo 12:37 dice: “Porque con tus palabras serás justificado, y con tus palabras serás condenado”. Dios nos hace responsables de nuestras palabras, porque nuestras palabras revelan el contenido y las decisiones de nuestro corazón. Nuestras palabras revelan nuestra intenciones y agendas reales. En Números 14:28, Dios declaró a Moisés y Aarón que los israelitas serían juzgados de acuerdo con sus propias palabras. Proverbios 13:3 dice: ‘El que refrena su lengua protege su vida, pero el ligero de labios provoca su ruina.” Tómate un tiempo para escuchar tus palabras. ¿Le das gloria a Dios con tus palabras? ¿Estás animando y alentando a otros? ¿O estás usando tus palabras para derribar y destruir a los demás?

Proverbios 12:18 “El que habla sin pensar hiere como un cuchillo, pero el que habla sabiamente sabe sanar la herida.”

Proverbios 18:21 “En la lengua hay poder de vida y muerte; quienes la aman comerán su fruto.”