Hay momentos en los que religión te puede llevar a un lugar de culpa y desesperanza. Hay quienes te condenaran cuando falles. Sin embargo, Dios en Cristo nos ha provisto para que no tengamos que caminar en vergüenza y culpa. Por el sacrificio de Cristo en la cruz, la gracia sobrenatural fue desatada para nosotros. Su poder nos impedirá tropezar con el pecado y nos llevará impecables ante su gloriosa presencia. ¡Ya no tenemos que vivir en condenación! Su amor venció la muerte, el infierno y la tumba por nosotros. Su gracia es más que suficiente para toda nuestra vida. ¡Elija caminar hoy en victoria, paz, confianza y alegría porque Él ya nos perdono, y nosotros también podemos perdonarnos a nosotros mismos y a los demás!
Judas 1: 24, 25 “Ahora, para El que tiene el poder suficiente para evitar que tropieces con el pecado y te lleve impecable ante su gloriosa presencia para estar ante El con deleite extático, al único Dios nuestro Salvador, a través de nuestro Señor Jesucristo, séa infinita gloria y majestad, gran poder y autoridad, desde antes de que El creara el tiempo, ahora y durante todas las edades de la eternidad. ¡Amén!